Ciudad de México, 25 de septiembre (SinEmbargo).- Facebook continúa por la senda de las publicaciones efímeras. Después de que Snapchat, la aplicación móvil de mensajes que se autodestruyen, rechazara su oferta de compra por tres mil millones de dólares, la red social lanzó Slingshot, otra app fugaz, con la que pretendía robarle parte del pastel. Y ahora todo parece indicar que Facebook se prepara para incorporar un botón de “autodestruir” a su propio muro.
Lo publica el Huffington Post, que cita declaraciones de una fuente de Facebook que reconoce que la plataforma está experimentando en su aplicación para iOS con un “piloto“ que, de aquí en adelante, permitiría a los usuarios programar la futura desaparición de sus posts en la red social.
De hecho, algunos de ellos ya han explicado a través de sus perfiles sociales en distintas redes como Twitter que esta opción ha aparecido en sus muros de Facebook. Es el caso de Stefano Maggi, quien tuitea un pantallazo del menú de “autodestrucción”, en el que se despliega una lista para que el usuario escoja si quiere que la publicación desaparezca definitivamente en una, tres, seis o doce horas, un día o una semana.
Is Facebook testing expiration for posts? pic.twitter.com/K6ULkclY6f
— Stefano Maggi (@stefanomaggi) septiembre 10, 2014
Aplicaciones aún por especificar
Las utilidades de esta actualización podrían ser muchas, pero aún está por determinar si Facebook la aplicará a todas las publicaciones que realicen sus usuarios (en este caso serán ellos los que escojan su aplicación: una declaración de amor también puede tener fecha de caducidad) o solo a algunas como cumpleaños o eventos señalados.
Otra pregunta interesante es cómo influirá esta nueva opción en el algoritmo que jerarquiza los contenidos que los usuarios ven en su muro, y si una publicación con fecha de caducidad próxima tendrá prioridad sobre otras que no estén programadas para desaparecer.
Un nuevo escenario de privacidad
Facebook vio casi desde el principio la next big thing en Snapchat, esa aplicación móvil de envío de imágenes y mensajes fugaces cuya inspiración, suelen decir su director general y su director técnico, Evan Spiegel y Bobby Murphy, procede, precisamente, de las consecuencias de las imágenes comprometedoras en las que a veces nos etiquetan en Facebook.
El no a la oferta de compra de Mark Zuckerberg volvió a Snapchat todavía más famosa y popularizó su uso, aseguraron entonces algunos, entre los jóvenes de la generación millenial, más celosos de su privacidad que sus mayores. Facebook reformó entonces su estrategia y se decidió a atacar con Slingshot, que cada día se parece más a Snapchat, y con lo que parece un nuevo experimento en su muro.
En una intervención que tuvo lugar el pasado mes de enero en la Universidad de Stanford (California), el fundador de Facebook se refirió a Snapchat como “un interesante fenómeno de la privacidad”, que posibilita que “los usuarios compartieran cosas que antes no podían compartir”.